Integrar las primeras experiencias, detectar y borrar los mensajes limitantes que recibimos, permitir el flujo libre de las emociones, reconocernos en ellas… Todo esto abre espacios en nuestro cuerpo y nuestro ser para que esa “personita llena de potencial” que vive dentro, te muestre cuan auténtica, creativa y gozosa puede ser tu vida.

No deja de ser paradójico que aquellos nos han transmitido la vida también nos hayan pasado «el virus del sistema»: un complejo entramado de programas que limitan el pleno desarrollo de nuestro potencial. De ahí la importancia, no solo de los padres sino también de los abuelos y abuelas. Las memorias de nuestro linaje viven en el interior de nuestras células. Nuestras raíces ancestrales conforman la base para toda la vida.

A través del trabajo sistémico y de Constelaciones Familiares, podemos atravesar estrecheces, bloqueos y condicionamientos del pasado para acceder a los dones y talentos que quizá estaban enterrados, deseando brotar y florecer.

El niño, o niña interna es esa parte de ti que está intimamente conectada con tu esencia. Si te comprometes a cuidarla y cumples con ello, creará nuevos paisajes en tu vida.

ASENTAR ESTE PILAR TE AYUDA A…

Transformar los mensajes que recibiste, por los que dejaste de mostrarte enfadad@ o triste… que crearon un guión de vida, un patrón de sensaciones y/o situaciones  que se han ido repitiendo limitando tus posibilidades.

Sanar el vínculo con tu niñ@ intern@ y tu mundo emocional

Te pondrá en contacto con tus recursos sin explorar… con tu creatividad

Te impulsará a actuar más allá de tus limitaciones y estrecheces de la mentalidad adulta

Abrirás la puerta a tu autenticidad, capacidad de disfrute y espontaneidad

Si tienes un centro o capacidad para reunir un grupo interesado y quieres organizar este taller, escríbenos a: info@gabriellarobles.es